***La mujer identificada como María Antonia Mejía Alfaro, fue la segunda hondureña que había sido diagnosticada con dicha enfermedad, ligada también al COVID-19.
[su_heading]Tegucigalpa, Honduras[/su_heading]
Una de las pacientes detectadas con mucormicosis o más conocido como “hongo negro” en Honduras, falleció este domingo en el hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula.
La mujer identificada como María Antonia Mejía Alfaro, fue la segunda hondureña que había sido diagnosticada con dicha enfermedad, ligada también al COVID-19.
El esposo de la mujer de 30 años, Santos Natarén, informó que, tras varios días de permanecer interna en el Hospital Mario Catarino Rivas, los médicos le comunicaron sobre el fallecimiento.
“Ella falleció a las 2:00 de la tarde, nos anunciaron para que hiciéramos los tramites de defunción en la funeraria. Los médicos dijeron que es una enfermedad agresiva y difícil de tratar”, expresó Natarén.
Manifestó que la fémina perdió peso, se fue deteriorando y perdiendo fuerzas, “estuvo hospitalizada desde el 28 de mayo y previamente estuvo tres días en el hospital de Tocoa, Colón”.
La hondureña originaria del municipio de Bonito Oriental, será velada unas horas y después le dará cristiana sepultura.
“Es el primer caso de hongo negro después de ser contagiada de COVID”, lamentó el hombre.
“Creí que ella iba a superar esta enfermedad, porque ella tuvo una mejoría, yo le hablaba y ella escuchaba, pero ya luego empeoró su salud y no pudo liberarse”, finalizó.
Sus restos mortales serán trasladados a La Libertad, municipio de Villanueva, Cortés para su velatorio, posteriormente la trasladarán a Tocoa, departamento de Colón de donde era originaria.
La mucormicosis es una infección que ataca agresivamente la nariz, los ojos y algunas veces el cerebro.
No obstante, no se transmite de persona a persona y ante un sistema inmunológico supreso la enfermedad se comporta de manera oportunista, agresiva y mortal hasta un 50 por ciento al no ser tratado de forma oportuna. GO/Hondudiario
