*** El impacto de las torrenciales lluvias ha dejado a más de 22,000 personas en condiciones de vulnerabilidad.
[su_heading]Tegucigalpa, Honduras[/su_heading]
El Cuerpo de Bomberos de Honduras intensifica este viernes las evacuaciones en las comunidades de Namasigüe y El Triunfo, ubicadas en el departamento de Choluteca, debido a inundaciones provocadas por el desbordamiento de ríos locales.
La situación de emergencia fue desencadenada por fuertes lluvias que se registraron durante la noche, saturando los suelos y aumentando los niveles de las cuencas hidrográficas.
El capitán Manuel de Jesús Álvarez, del Cuerpo de Bomberos en Choluteca, reportó que un equipo de ocho bomberos ha sido desplegado en las áreas afectadas, trabajando en coordinación con el ejército para llevar a cabo las tareas de evacuación y rescate. “Hemos recibido varias llamadas de comunidades como San Bernardo, en Namasigüe, y otras de El Triunfo”, informó Álvarez.
De acuerdo con el capitán, “la orden de acuerdo a ley es evacuar a todas las personas que estén en riesgo”, destacando la gravedad de la situación en las áreas afectadas. Aunque las condiciones climáticas habían mejorado el día anterior, las lluvias intensas de la noche llevaron a que ríos y afluentes alcanzaran niveles alarmantes.
Las zonas de San Bernardo y Namasigüe, conocidas por ser bajas y extensas, han experimentado inundaciones significativas. En este contexto, se están realizando operaciones de rescate y evacuación, y se espera que en las próximas horas se proporcione un informe sobre la cantidad de personas evacuadas.
Por su parte, la Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales de Honduras (Copeco) emitió un reporte reciente confirmando tres decesos relacionados con las lluvias en el país. Además, el organismo de prevención ha informado que un total de 5,015 familias se han visto afectadas por las inundaciones, con 4,964 damnificados y 441 personas evacuadas.
El impacto de las torrenciales lluvias ha dejado a más de 22,000 personas en condiciones de vulnerabilidad, y se han contabilizado 593 viviendas dañadas, de las cuales 27 han sido completamente destruidas. La situación ha llevado a que 75 comunidades se encuentren incomunicadas debido a los desastres naturales.
Las autoridades locales continúan evaluando los daños y coordinando esfuerzos para atender a la población afectada, mientras se realizan trabajos de desalojo y asistencia en las áreas más críticas. La situación sigue siendo monitoreada de cerca, con el objetivo de garantizar la seguridad de los residentes en las zonas en riesgo.
El Cuerpo de Bomberos y otras entidades de emergencia trabajan en responder a esta crisis y brindar la ayuda necesaria a quienes se encuentran en situaciones peligrosas, reforzando la importancia de la prevención y la preparación ante fenómenos naturales de esta magnitud. OB/Hondudiario
