*** Castellanos planteó la interrogante de si la administración de Xiomara de Zelaya aprenderá de sus errores pasados.
La exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, ofreció un análisis crítico sobre la postura adoptada por el Gobierno de Honduras frente a los Estados Unidos, particularmente en el contexto de los desafíos que supone la asunción de Donald Trump en la presidencia de ese país.
Castellanos planteó la interrogante de si la administración de Xiomara de Zelaya aprenderá de sus errores pasados o persistirá en una política de confrontación.
La académica destacó como uno de los puntos más polémicos el gesto de desaire de la mandataria hondureña al no asistir a la Cumbre de las Américas, enviando en su lugar a sus hijos y al canciller. Fue un desplante que no pasó desapercibido, sobre todo cuando otros mandatarios de América Latina sí estuvieron presentes, recordó Castellanos.
En su análisis, Castellanos cuestionó el enfoque “hostil y confrontativo” que caracteriza las relaciones entre el Gobierno hondureño y Estados Unidos, citando como ejemplo las críticas directas hacia la embajadora estadounidense, Laura Dogu. La socióloga señaló que estas actitudes reflejan prejuicios ideológicos alineados con el socialismo del siglo XXI, una postura que, según ella, distancia a Honduras de los valores democráticos promovidos por Washington.
Asimismo, la exrectora alertó sobre lo que considera una visión desproporcionada de Honduras frente a conflictos ideológicos globales. Este pequeño país parece creer que tiene los atributos para entrar a esas ligas, pero la realidad es que nuestras vulnerabilidades nos hacen extremadamente frágiles, expuso.
Castellanos también advirtió que la llegada de los republicanos al poder en Estados Unidos podría intensificar la vigilancia sobre el país. “Ellos llevan años observando, y la información recopilada por congresistas como Marco Rubio y otros republicanos ya está en manos de quienes hoy tienen el poder de tomar decisiones,” afirmó.
Una de sus críticas más contundentes fue dirigida hacia el equipo gubernamental. Según Castellanos, “el gobierno carece de interlocutores para el diálogo y la planificación estratégica. Lo que tiene son personas para atacar y descalificar, y eso no ayuda en coyunturas tan críticas como esta”.
“El gobierno tiene funcionarios para responder con hostilidad, tiene funcionarios para atacar, tiene funcionarios para descalificar, pero no tiene funcionarios operativos, no tiene funcionarios con una formación académica que los lleve realmente a entender las coyunturas; ellos creen que atacando y descalificando van a lograr sus objetivos, pero en esto obviamente quién timonea el país es la señora presidenta y si ella permitió que esos funcionarios estuvieran atacando y descalificando en todo este periodo, eso ha facilitado el camino para que el gobierno actual de Estados Unidos, hoy tenga información o tenga una estrategia”, agregó Castellanos.
Además, Castellanos resaltó los riesgos económicos y estratégicos que enfrenta Honduras, como la fuerte dependencia de las remesas, que representan más del 25 por ciento del PIB, y la falta de diversificación en sus alianzas comerciales. Mencionó como ejemplo la incapacidad de consolidar relaciones efectivas con China. “Ni siquiera los camarones del Golfo de Fonseca están comprando, y en tres años no han logrado algo tan simple como mandar a hacer placas de vehículos. Es un nivel de incapacidad alarmante”, lamentó.
En este contexto, Castellanos enfatizó que el gobierno hondureño enfrenta una coyuntura delicada en la que deberá replantear su estrategia para evitar un aislamiento mayor en el ámbito internacional, mientras enfrenta crecientes desafíos internos. OB/Hondudiario