*** La Biosfera de Río Plátano es una de las áreas protegidas con mayor ingobernabilidad comunitaria, debido al abandono del Estado hondureño y las operaciones del narcotráfico.
[su_heading]Tegucigalpa, Honduras[/su_heading]
El Consejo Nacional de Defensa y Seguridad comunicó, este domingo, que los diálogos con moradores de la Biosfera de Río Plátano y otras reservas cercanas en los departamentos de Olancho y Gracias a Dios, se estancaron debido al abandono de las negociaciones por parte de los comunitarios.
Las autoridades advirtieron que continuarán con las acciones necesarias, para la recuperación de las áreas protegidas, destruidas y degradadas, incluso dentro de la zona núcleo. Los desalojos e intervención militar seguirán se comenzaron a ejecutar desde hace algunos días, pese a que comunidades denunciaron que no se avisó con suficiente antelación.
La Biosfera de Río Plátano es una de las áreas protegidas con mayor ingobernabilidad comunitaria, debido al abandono del Estado hondureño y las operaciones del narcotráfico, que en algunos casos con sus ganancias financian actividades económicas, como la ganadería y extracción de maderas.
Sin embargo, el Gobierno destacó este domingo que la mayoría de personas son de buena fe y desean que se recuperen las áreas protegidas de Gracias a Dios y Olancho, al nororiente del país.
Moradores de las reservas, por su parte, desmintieron que se hayan retirado del diálogo y aunque se retiraron de la última reunión, el sábado, solamente pidieron algunos días de plazo para analizar las propuestas del Gobierno y presentar una contrapropuesta, para llegar a consensos.
Los ocupantes de las áreas protegidas descartaron que vuelvan a tomarse las carreteras del país, mientras sigan las negociaciones con el Gobierno, que basa todas estas acciones de intervención en el Plan de Cero Deforestación al 2029.
Luis Solíz, director del Instituto de Conservación Forestal (ICF), reiteró que el Estado hondureño está dispuesto a recuperar el Corredor Biológico Mesoamericano, sin treguas, porque los bienes comunes no se negocian.
“Destruyeron y devastaron nuestras áreas de reservas forestales, usurparon territorios indígenas y establecieron el control del narcotráfico en el Corredor Biológico Mesoamericano. Hoy el Estado ha decidido recuperar, sin concesiones ni treguas, las áreas protegidas, los bosques tropicales y las fuentes de agua que pertenecen al pueblo hondureño y de la humanidad. No habrá espacio para el sabotaje, ni para el miedo. Los bienes comunes de Honduras no se negocian. ¡Es el momento de refundar nuestra soberanía territorial y ambiental!”, dijo Luis Solíz, director del Instituto de Conservación Forestal (ICF).
COMUNICADO: