miércoles, febrero 5, 2025
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La mortalidad neonatal en Honduras, suma a 11 de cada mil nacidos vivos

Tegucigalpa, Honduras

*** La UNAH a través del Posgrado en Enfermería con orientación en Ginecología y obstetricia, durante dos días, analizará la tasa de mortalidad neonatal en el país donde se incluye más de 10 mil ingresos hospitalario por abortos.

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Al menos 7 de cada 10 niños que fallecen en Honduras, son recién nacidos y según los registros de la Secretaría de Salud, indican que el promedio de egreso hospitalario por aborto es de 10 mil mujeres al año, considerando la tasa de mortalidad neonatal en el quinquenio más reciente en el país, donde se estima en 11 por cada 1.000 nacidos vivos.

Lo anterior, se conoció en el taller denominado «Proyecto de Vinculación Universidad Sociedad», que realiza el Posgrado en Enfermería con orientación en Ginecología y obstetricia, con la «Fundación de Angelitos» y el Fondo de Población de la Naciones Unidad (UNFPA), en la capital hondureña en un hotel capitalino.

Durante las exposiciones, se indicó que la tasa de mortalidad neonatal en el quinquenio más reciente se estima en 11 por cada 1,000 bebes nacidos vivos, que la mortalidad neonatal representa el 70% de la mortalidad infantil en Honduras, que 7 de cada 10 niños que fallecen en Honduras, son recién nacidos, según los registros de la Secretaría de Salud, considerando además que el promedio del egreso hospitalario por aborto es de 10 mil mujeres al año y en el 2018 (dato más reciente), se registraron 8,228 egresos hospitalarios por aborto en el país.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la mortinatalidad como las muertes fetales las ocurridas a las 28 semanas de embarazo o después de la misma, pero antes o durante el parto, en tal sentido la OMS estima que hay más de 2 millones de mortinatos por año en todo el mundo; alrededor del 40% de ellos ocurren antes del trabajo de parto. (Organización Mundial de la Salud, 2020).

Según los registros. la mortalidad neonatal, puede ocurrir en diferentes momentos, tales como: En el útero, antes del inicio del trabajo de parto, también denominada muerte intrauterina, durante el trabajo de parto y parto, denominada como mortinatalidad pretérmina (ocurre antes de las 37 semanas de embarazo) o a término o mortinatalidad intraparto (ocurre a las 37 semanas de embarazo o después). (National Institute of Child health and Human development, 2023).

En el año 2021 se produjeron en todo el mundo alrededor de 1,9 millones de mortinatos (bebés nacidos sin signos de vida a las 28 semanas de embarazo o después), de los cuales muchos de ellos podrían haberse evitado con los cuidados adecuados.

Según los últimos datos, la tasa mundial de mortinatos en el año 2020 fue de 13,9 mortinatos por cada 1.000 nacimientos totales. Esto equivale a 1 de cada 72 nacimientos totales que resultan en un bebé muerto, o uno cada 17 segundos. Aun así, esta cifra puede ser una subestimación, ya que los mortinatos a menudo no se denuncian. (UNICEF, 2023)

En promedio, el riesgo de un mortinato es más de siete veces mayor en los países de bajos ingresos (21 mortinatos por cada 1,000 nacimientos totales) que en los países de altos ingresos (3.0 mortinatos por cada 1,000 nacimientos totales). (UNICEF, 2023)

La carga desigual de los mortinatos entre los países también se observa dentro de los propios países. Las tasas de mortinato son más altas en las zonas rurales que en las urbanas, y el estatus socioeconómico también está relacionado con una mayor incidencia de mortinatos. (Network, 2023)

En Honduras, las principales causas de mortalidad en el periodo perinatal y neonatal son las complicaciones las asociadas a la prematuridad, secundarias a afecciones o infecciones maternas. los defectos congénitos, la sepsis e infecciones, y la asfixia perinatal. (OPS, 2023)

La tasa de mortalidad neonatal en el quinquenio más reciente se estima en 11 por cada 1000 nacidos vivos, lo cual representa el 65 por ciento de la mortalidad infantil. (ESTADISTICA, 2019)

Los mortinatos están ocurriendo con una “frecuencia alarmante” en muchos países. Y aunque se ha avanzado en la reducción de la tasa mundial de mortinatos, las ganancias son desiguales.

“Más allá de la devastadora pérdida de vidas, los costos psicológicos y financieros para las mujeres, las familias y las sociedades, son graves y duraderos”. En algunas culturas, los mortinatos se perciben como culpa de la madre, lo que resulta en vergüenza pública o sentimientos individuales de culpa o vergüenza que impiden el duelo público por su pérdida. (UNICEF, 2023)

La falta de oportunidad de llorar públicamente puede hacer que los mortinatos se consideren “no eventos”. Tales tabúes sociales, estigmas y conceptos erróneos a menudo silencian a las familias o impactan en el reconocimiento y el duelo de los mortinatos, contribuyendo a su invisibilidad.

“Eso a menudo significa que los padres afligidos se quedan con preguntas sin respuesta y dolor sin abordar”. La pérdida de un bebé a causa de un mortinato es una realidad devastadora para muchas familias, la cual impone un costo enorme a su salud y bienestar. (UNICEF, 2023)

Justificación del proyecto

La mortinatalidad, definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la muerte fetal ocurrida a las 28 semanas de embarazo o después, antes o durante el parto, constituye un problema de salud pública de alta relevancia.

Según datos recientes, en el año 2021 ocurrieron aproximadamente 1,9 millones de mortinatos a nivel mundial, lo que equivale a uno cada 17 segundos. Esta realidad no solo representa una pérdida devastadora para las familias afectadas, sino que también plantea desafíos significativos para los profesionales de salud que las acompañan en el proceso de duelo.

En Honduras, las tasas de mortalidad perinatal y neonatal continúan siendo alarmantes, con una mortalidad neonatal de 11 por cada 1.000 nacidos vivos, representando el 65% de la mortalidad infantil (OPS, 2023). Las principales causas, como complicaciones relacionadas con la prematuridad, infecciones maternas, defectos congénitos, sepsis e infecciones neonatales y asfixia perinatal, subrayan la necesidad de atención integral y especializada.

Sin embargo, más allá del manejo clínico, los profesionales de salud en unidades maternas enfrentan un vacío en las herramientas y competencias para apoyar a las familias en el duelo perinatal, un aspecto frecuentemente invisibilizado en contextos socioculturales donde persisten estigmas, tabúes y culpabilización de las madres.

El impacto emocional y psicológico de un mortinato es profundo y duradero. Las familias enfrentan un dolor inabordable, muchas veces en soledad, debido a la falta de reconocimiento público del duelo, lo que agrava el sufrimiento y dificulta la recuperación emocional.

En las unidades maternas de Honduras, la ausencia de protocolos estructurados para abordar el duelo perinatal no solo afecta a las familias, sino también a los profesionales de salud, quienes pueden experimentar estrés emocional y desgaste laboral por la falta de capacitación adecuada para manejar estas situaciones. .

Para tratar y contribuir a este problema social, que no tiene visibilidad, nace el proyecto «Ángeles en el cielo: apoyando el proceso del duelo perinatal» como una respuesta integral a esta problemática, con el objetivo de capacitar a los profesionales de salud en el manejo emocional, ético y culturalmente sensible del duelo perinatal. Este proyecto, desarrollado desde el posgrado de enfermería en Ginecobstetricia, busca dotar a los equipos de salud de herramientas prácticas basadas en evidencia, que les permitan acompañar a las familias en su proceso de duelo, promoviendo una atención humanizada, respetuosa y empática.

La propuesta de intervención se justifica desde varias dimensiones:

  1. Dimensión social: aborda la necesidad de visibilizar el duelo perinatal como una experiencia legítima y digna de atención, reduciendo el estigma y promoviendo el reconocimiento del dolor de las familias afectadas.
  2. Dimensión emocional y psicológica: contribuye a mitigar el impacto emocional tanto en las familias como en los profesionales de salud, fomentando espacios de apoyo y cuidado mutuo.
  3. Dimensión ética y profesional: fortalece la capacidad del personal de salud para ofrecer una atención centrada en la persona, respetuosa de los valores, creencias y necesidades de las familias en duelo.
  4. Dimensión institucional: promueve la creación de protocolos estandarizados en las unidades maternas para el manejo del duelo perinatal, mejorando la calidad de la atención y posicionando a Honduras como un referente en prácticas humanizadas.

Este proyecto no solo responde a una necesidad urgente, sino que también refleja el compromiso del posgrado de enfermería con la mejora de la atención en salud materno-perinatal, contribuyendo al bienestar integral de las familias hondureñas y a la formación de profesionales de salud con un enfoque. humanizado y culturalmente competente.

A través de este proyecto se pretende lograr la sensibilización en los diferentes actores, como también que:

  1. Miembros del equipo de salud: Profesionales de enfermería, Auxiliares de Enfermería, Médicos especialistas, Médicos Residentes, psicólogos de las unidades de Emergencia de ginecología, Labor y parto, Puerperio, Patológico, Séptico y Ginecología del Bloque materno Infantil del Hospital Escuela sensibilizados en la importancia del abordaje adecuado del duelo perinatal.
  2. Uso de símbolos (Ángeles), en las camas asignadas a las madres con pérdidas de sus hijos, para brindar un manejo empático, solidario y respetuoso que favorezca el proceso de duelo.
  3. Identificación y adecuación de un espacio físico para la atención de las madres con mortinatos, diferente al de las madres con sus hijos vivos a fin de evitar mayores sentimientos de angustia y dolor.

Asimismo, se pretende lograr que:

  1. Miembros del equipo de salud: Profesionales de enfermería, Auxiliares de Enfermería, Médicos especialistas, Médicos Residentes, psicólogos de las unidades de Emergencia de ginecología, Labor y parto, Puerperio, Patológico, Séptico y Ginecología del Bloque materno Infantil del Hospital Escuela sensibilizados en la importancia del abordaje adecuado del duelo perinatal.
  2. Uso de símbolos (Ángeles), en las camas asignadas a las madres con pérdidas de sus hijos, para brindar un manejo empático, solidario y respetuoso que favorezca el proceso de duelo.
  3. Identificación y adecuación de un espacio físico para la atención de las madres con mortinatos, diferente al de las madres con sus hijos vivos a fin de evitar mayores sentimientos de angustia y dolor.

En general, es promover un proceso de capacitación y concientización en el personal médico y de enfermería para el manejo intrahospitalario adecuado de las madres que se encuentran en duelo perinatal por diferentes procesos obstétricos, con la finalidad de contribuir al desarrollo de estrategias de acompañamiento y de afrontamiento eficaces.

También desarrollar un proceso educativo y reflexivo dirigido al personal médico y de enfermería sobre el impacto de la perdida perinatal en las madres, con el fin de crear consciencia sobre la importancia de brindar una atención sensible y empática en el ambiente hospitalario.

Implementar estrategias de identificación de las madres que han sufrido la pérdida de su hijo, favoreciendo a través de las mismas un apoyo inicial al proceso doloroso y a la futura la resiliencia, además de capacitar al personal médico y de enfermería en técnicas de acompañamiento ante situaciones de duelo perinatal. MO/Hondudiario Terapia social para madres por «duelo neonatal»

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