*** La politización en las relaciones internacionales del país impide una gestión efectiva en beneficio de la población migrante.
El economista Julio Raudales advirtió que una posible revocación del Estatus de Protección Temporal (TPS) por parte de Estados Unidos afectaría a más de 50,000 hondureños, quienes regresarían al país sin condiciones adecuadas para su reinserción social y económica.
“Honduras está en el top 3 de países con más migrantes en Estados Unidos debido a la incapacidad del Estado de generar condiciones adecuadas para la permanencia de las personas que quisieran vivir, trabajar y buscar su felicidad en nuestro país, que tanto potencial tiene”, señaló el experto en una entrevista televisada.
Raudales expresó su preocupación por la ausencia de programas específicos en el Presupuesto de 2025 para atender a los retornados.
Además, recordó que, según datos de la Encuesta de Hogares del INE, en Honduras hay más de 250,000 personas desempleadas, cifra que representa el 5 por ciento de la población económicamente activa.
“Si a esto se suman 50,000 migrantes retornados, o más, la crisis laboral se agravaría considerablemente”, alertó.
Desde Washington, la fuente económica compartió testimonios de migrantes hondureños que viven con temor a la deportación.
“Nos comentan que la gente está escondida, que tiene miedo de ser deportada”, afirmó.
Aun así, expuso que la decisión de revocar el TPS corresponde exclusivamente a las autoridades estadounidenses.
Es una decisión soberana de Estados Unidos, y hay que recordar que el presidente Donald Trump ha regresado con mayorías tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes, por lo que será muy difícil evitar que estas medidas de deportación se materialicen, planteó.
Además, criticó la falta de capacidad de la diplomacia hondureña para gestionar este tipo de crisis. “Lamentablemente, la diplomacia hondureña no es la más profesional del istmo, es una de las carreras que tienen la menor capacidad de negociación”, señaló.
Raudales concluyó que la politización en las relaciones internacionales del país impide una gestión efectiva en beneficio de la población migrante. OB/Hondudiario