URNAS. Ha habido llamados a elecciones pacíficas y a la calma por tierra, mar y aire y lo que se espera es que los líderes políticos, sobre todo del PN y de Libre, no paren entre hoy y mañana llamando a su gente a que acuda a las urnas en paz.
BURROS. El “papi” avisa que si mañana se convierte en presidente, seguirá sin chofer, manejando su carro y siempre con sus burros y sus jeans.
MISA. El olanchano tuvo misa ayer con las misiones de observadores que le andan echando un ojito a las elecciones, incluida la europea, la de la OEA y el Observatorio Electoral de Partidos de LA y el Caribe.
JURÓ. El líder supremo de Libre le juró a los observadores que ellos son los más interesados en que las elecciones sean masivas y transparentes y que, por parte de su partido, no existe ninguna amenaza al proceso.
LOOPS. Calma, calma, que no pande el cúnico, como decía el Chapulín, que nadie se aflija ni se afloje, porque por fin arribaron los escáneres, las impresoras y los tales loops que faltaban.
BIEN. Ojalá que todo salga bien mañana. Seguro que ningún hondureño bien nacido quiere que las cosas salgan mal.
CNE. Como aquí todo se toma a mal. Con tiempo se advirtió que el trabajo del CNE era organizar el proceso, no estar en rabietas de niñas caprichosas, en dimes y diretes, que llueva, truene o relampaguee, y que no sé qué, que aquí que allá.
DECIR. Hasta montaron conferencias de prensa para decir que las alertas eran “campañas de odio” y hasta “violencia de género”.
CERO. Hubo cero capacitaciones para el manejo de todos esos chunches de los kits tecnológicos. Pero, ojalá que mañana todo salga bien, y que la “people” de las mesas se las ingenie para transmitir.
PRIMER. Y ojalá que mañana, si se cumple con el primer corte a las 8:00 de la noche, no se salgan peleando por quién leerá el comunicado.
ROMEO. Allí le siguen sacando a bailar a Romeo que lleva toda su parentela en sus planillas: Hijos, cuñados, sobrinos, primos, en fin…