*** El francés volvió a ser decisivo en un partido atascado para su equipo.
Nueva victoria del Al-Ittihad de Karim Benzema ante el Sfaixen (1-0) en el Campeonato de Clubes Árabes. El ex del Real Madrid debutó con el equipo árabe en la victoria de los suyos ante el Esperance de Túnez hace tres días, partido en el que anotó un gol y dio una asistencia, (y hoy ha vuelto a ser decisivo para su equipo). El reciente campeón de la Liga Árabe se medía a un Sfaixen que perdió en la primera jornada del torneo ante el Al Shorta iraquí.
El partido parecía, a priori, más desequilibrado de lo que después se dio -al menos en la primera mitad-. La primera parte estuvo muy disputada entre ambos equipos hasta el minuto 20. Benzema avisó primero en el partido en el minuto 9 tras un buen disparo con la zurda desde fuera del área que se marchó fuera rozando el larguero. El Sfaxien quiso sorprender, y en su único acercamiento al área rival, generó peligro en una jugada en la que el defensa del Al-Ittihad Al Hawsawi estuvo correcto despejando de cabeza el centro que el conjunto tunecino había colocado.
A partir del minuto 20, el dominio fue total por parte de los locales, que comenzaron a lanzar centros al área, aunque sin remate claro. La ocasión más clara la tuvo en sus botas Hamdallah. El atacante marroquí salió en una contra con el balón controlado y tras una buena carrera, lanzó un zapatazo al palo largo de la portería de Gaaloul, que hizo una gran estirada y la detuvo. Cerca del final de la primera parte hubo polémica. Hussein Ali le hizo una falta a Hamed, que cayó al suelo. Ali trató de evitar golpearle saltando por encima de él con la mala fortuna de pisarle la cara con los tacos. El árbitro, que le había sacado amarilla en primera instancia, fue llamado por el VAR y tras revisarlo decidió expulsar al ’10’ del Sfaixen.
Nuno Espírito Santo, entrenador del Al-Ittihad, no quedó muy contento con la primera mitad e introdujo tres cambios en el descanso. Entraron así Al-Farhan por Hamed, Bamsaud por Shanqeeti y Al-Olayan por Al-Amri. En el comienzo de la segunda mitad, el Al-Ittihad trató de anotar un gol pronto, pero una gran defensa del Sfaixen no se lo permitió. Tuvo que aparecer la magia de Karim Benzema para desatascar el partido en el minuto 62. Tras un rebote dentro del área que acabó con el balón en el aire, Hamdallah se quedó con el balón y se lo pasó de cabeza a Benzema. El francés sacó sus dotes de Balón de Oro, y con un buen giro de cadera y un tiro raso potente puso el balón en el fondo de la red. Eso sí, tocó el palo antes de entrar.
Tras el gol, el Al-Ittihad continuó el con el dominio del encuentro encerrando a su rival, que poco pudo hacer y perdía el balón en muy poco tiempo tras recuperarlo. No pudieron ampliar la ventaja los campeones de Arabia Saudí ante un rival que se quedó con nueve jugadores al final del partido tras la expulsión de Conté al recibir la segunda amarilla en el minuto 84.
Karim Benzema ya pone el nombre del Al-Ittihad en el punto de mira y sigue sin perder esa esencia que empezó a demostrar desde muy joven en el Olympique de Lyon y, posteriormente, en el Real Madrid. Marca/Hondudiario