*** Un total de 74 centros educativos, entre privados y públicos, engalanan este año las calles de la capital con sus coloridos contingentes.
Decenas de instituciones educativas, tanto públicas como privadas, recorrieron este domingo el bulevar Suyapa en Tegucigalpa, demostrando su orgullo cívico al celebrar el 203 aniversario de la independencia de Honduras.
Los desfiles comenzaron muy temprano en la mañana con una solemne escolta de banderas, liderada por cadetes de la Academia Militar General Francisco Morazán, quienes portaban los emblemas de las naciones centroamericanas.
El desfile se desarrolló desde el sector de Plantas Tropicales hasta llegar al Estadio Nacional José de la Paz Herrera “Chelato” Uclés, donde la presidenta Xiomara Castro de Zelaya, junto a su familia y miembros de su gabinete, observa desde el estrado principal la participación de los estudiantes. Un total de 74 centros educativos, entre privados y públicos, engalanan este año las calles de la capital con sus coloridos contingentes.
Las Fuerzas Armadas también tienen una presencia destacada en la jornada, realizando demostraciones que acompañan el recorrido estudiantil y que captan la atención de la multitud que se ha congregado en las calles. Estos pelotones militares marchan con disciplina hasta las instalaciones del estadio, ofreciendo un espectáculo de precisión y fuerza.
El Comité Cívico Interinstitucional estructuró el desfile dividiendo a los colegios en bloques y distritos, de acuerdo con un orden establecido. Tras el paso de la escolta de banderas, el primer bloque, compuesto por 10 instituciones, inició su desfile. Encabeza la lista el Instituto Juan Leclerc, seguido por otras prestigiosas instituciones, como el emblemático Instituto Central Vicente Cáceres.
Dentro del Estadio Nacional, los estudiantes desfilan con entusiasmo bajo la mirada de las autoridades, mientras el público aplaude el esfuerzo de cada uno de los centros educativos. Para muchos, esta es la parte más esperada de las celebraciones patrias.
Las bandas escolares, siempre un elemento clave en los desfiles patrios, llenan el ambiente con sus ritmos enérgicos, ejecutando piezas musicales que sincronizan perfectamente con la marcha de los estudiantes. Los tambores y trompetas se escuchan a lo largo de todo el recorrido, avivando el espíritu de los participantes y del público.
Entre la música de las bandas, las palillonas destacan con sus coreografías elegantes y llenas de color. Vestidas con uniformes brillantes, estas jóvenes realizan complejas rutinas con bastones que giran al ritmo de la música, después de meses de preparación para esta importante ocasión.
Desde temprano, las palillonas posan para las cámaras de los medios locales mientras se preparan para su recorrido hacia el Estadio Nacional. Su presencia es siempre uno de los momentos más celebrados por los asistentes, que disfrutan de la destreza y gracia con la que ejecutan sus movimientos.
La jornada cívica continúo con más demostraciones y desfiles a lo largo del día, en una celebración que no solo conmemora la independencia de Honduras, sino que también refuerza el sentido de identidad y pertenencia entre los jóvenes.
Los espectadores, que se agolpan en las aceras del bulevar Suyapa, aplaudían al paso de los contingentes, mostrando su apoyo a los estudiantes que, con disciplina y dedicación, rinden homenaje a la patria. Así, una vez más, la independencia de Honduras es celebrada con fervor y alegría.
Siempre los colegios más esperados son el Instituto Central Vicente Cáceres, el Mixto Hibueras, Jesús Aguilar Paz, Técnico Honduras, entre otros.
La presidenta de Honduras, Xiomara de Zelaya presenció desde el estrado principal instalado en el estadio Nacional, a cada uno de los centros educativos que pasaron frente a ella, y también aprovechó para saludar a los estudiantes. A las 12:00 del mediodía discursó ante todos los presentes. Las graderías estaban ocupadas en su mayoría por simpatizantes de Libre.
Luego, se dio espacio para el show de los paracaidistas de la Fuerza Aérea Hondureña, quienes, con su hazaña de dominar los cielos, se roban todas las ovaciones y admiración del público.
La jornada continúo por la tarde, cuando los rayos del sol cesaban en intensidad, la celebración de los 203 años de independencia otorgó a cada centro educativo su momento de brillar, y cada estudiante que desfiló lo hizo con fervor y amor a la patria. OB/Hondudiario
